La nueva era de los muebles tecnológicos


La nueva era de los muebles tecnológicos



Todo cuanto nos rodea está concebido y creado para brindarnos comodidad y equilibrio en nuestro estilo de vida, más si se trata de objetos marcados por el avance tecnológico como el Internet, los ordenadores, las tablets y los teléfonos de última generación. Pero la era inteligente ha transformado la manera de cómo vivimos hasta el punto de revolucionar el hogar y el sector mobiliario.
Pareciera que “el hogar del futuro” está más cerca. Cada vez son más los electrodomésticos y muebles que fusionan el diseño, el arte y la tecnología, permitiéndonos experimentar una cercanía en tiempo real con cada artefacto dispuesto en nuestro hogar, que no solo nos da esa sensación de “decoración” sino que nos genera estímulos y reacciones al momento de conectarnos con ellos.
Ahora, ¿qué propósito tiene incorporar la tecnología en los muebles? ¡La interacción! Lograr que cada persona se conecte con el mueble, su estructura y mecanismo hasta el punto que éste se adapte a sus necesidades es la visión que se persigue. A una silla tecnológica, por ejemplo, podríamos decirle a qué altura debe llegar según nuestra estatura o que se amolde a nuestra postura tomando en cuenta el peso y la contextura física.
En el caso de una mesa de escritorio inteligente, podríamos tener al alcance de nuestras manos cualquier información que necesitemos, pues, podríamos interactuar con ella tocando diferentes puntos de la mesa y hasta comunicarnos con personas que estén en cualquier parte del mundo, es decir, que ofrezca una tecnología similar a la de un televisor o a la de un computador.
La llegada de las nuevas tecnologías a ciertos objetos de uso cotidiano sin duda va más allá de la domótica; cuyo proceso integra técnicas orientadas a automatizar y monitorizar una vivienda en áreas como el sistema de seguridad, el sistema de comunicaciones y en la gestión energética. Desde parlantes diseñados para estar en los armarios, mesas con reproductor MP3 incluido o muebles con un sistema multimedia incorporado figuran como algunos de los equipos ya creados, pero ahora el reto es seguir avanzando en su funcionalidad y su versatilidad.
Con estas propuestas en el mercado, los gigantes de las nuevas tecnologías buscan ahora que esos objetos tengan más de una función, siempre adaptándose a los requerimientos de cada usuario. Más en específico; una mesa que se despliega desde la pared para manipularla como tablet y que a su vez pueda utilizarse como un escritorio o una mesa para cenar en familia o individualmente.
De acuerdo a la Consultora Gartner, se estima que para el 2020 existan unos 30 mil millones de dispositivos conectados a Internet, esto prácticamente obliga a los gigantes tecnológicos a continuar innovando en sus equipos. Como el caso de Google al comprar Nest para luego dar paso a Brillo, un sistema operativo de Android para controlar el Internet de las cosas.
Tecnología y la eficiencia energética
Hay empresas que ya están trabajando en sus propias plataformas tecnológicas como sucede con Samsung. Entre sus propuestas destaca el uso de Thread, que consiste en un protocolo de comunicación que reduce la cantidad de energía que requieran los dispositivos, puesto a que algunos no se conectan a la corriente eléctrica.
La razón por la que la domótica está inmersa en los hogares apunta al ahorro energético eficiente. Se piensa que en el 2018 existan un total de 500 millones de dispositivos domóticos inalámbricos en los hogares. Mencionamos, pues, que las bombillas inteligentes que ideó Philips iluminan de una forma diferente el interior de una vivienda. También se hace alusión a Panasonic que recientemente creó su propio sistema de seguridad y monitorización de control domótico que se conecta al Homekit de Apple.
La tendencia en los muebles tecnológicos no para. Los avances en la tecnología también ha cambiado drásticamente la forma en la que guardamos nuestros dispositivos. Algunos mobiliarios ya vienen con pequeñas cavidades o cajoneras para almacenar los teléfonos móviles o las tablets. Otros cuentan con puertos de entradas inalámbricas y hasta entradas de USB.
Pero no todos estos artefactos apuntan hacia la funcionalidad, también son creados por fines estéticos y decorativos más que por cualquier otra cosa. Un ejemplo de ello, son las mesas que se son capaces de retroiluminarse con una gama de colores para los diferentes ambientes e inclusive los estados de ánimos de las personas. La mayoría son creadas en un material traslúcido que se combinan con las técnicas y artes de la cantería, marmolería, orfebrería y la electrónica.
Lo novedoso de esta mesa decorativa es que se puede programar, mediante el uso de un teléfono inteligente o Wi-Fi, el color de la luz del cubo de alabastro cambie –esta funciona con 600 diodos LED–.
Pro y contra de la tecnología
Tanto en el hogar como en una empresa la inclusión de las nuevas tecnologías significa la mecanización y la automatización de los procesos que allí convergen para facilitar las actividades el día a día, pero además pueden generar una serie de ventajas y hasta desventajas según sea el caso. Veamos algunas explicaciones:
-Innovaciones como el Internet pueden a ayudar a la expansión de las pequeñas y medianas empresas en el mercado global, ya que pueden valerse del uso de una página web o de las redes sociales para promocionar sus productos o servicios.
-En los hogares, la tecnología puede reducir significativamente los costos en el consumo de energía, puesto a que los dispositivos y artefactos actualmente tienen ciertas características que se direccionan a esta nueva modalidad de ahorro eficiente, por ejemplo, el uso de bombillas inteligentes o LED.
-En un negocio, el contar con escritorios que incorporen un sistema multimedia de vanguardia, puede hacer que las estrategias y metodologías de trabajo sean más óptimas y sustentables.

-Adaptar esos escritorios o lugares de trabajo con un mobiliario pensado para la carga de teléfonos móviles o tablets en una oficina al inicio puede producir un costo de inversión, es cierto, pero a la larga supondrá una reducción de gastos, ya que los trabajadores no tendrán problemas o inconvenientes para cumplir con sus metas desde cualquier lugar de la oficina.